Con motivo de un acto conmemorativo del 20º aniversario del genocidio en Ruanda, el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, dijo el jueves que la ONU había realizado importantes lecciones del fracaso de la comunidad internacional para responder al genocidio en 1994.
"Siempre recordaremos a los 800.000 inocentes que fueron brutalmente asesinados", dijo Ban en la inaguración en Nueva York del evento titulado «Kwibuka 20" con el lema "Memoria, Unidad, Renovación". El genocidio de Ruanda fue un fracaso histórico de la comunidad internacional, que no ha respondido a los crímenes cometidos.
El Secretario General hizo hincapié en que la ONU ha adoptado una serie de lecciones de este fracaso y ha mejorado su capacidad de respuesta desde entonces.
"Los Estados miembros han adoptado la responsabilidad de proteger. Hemos establecido la Oficina del Asesor Especial de las Naciones Unidas sobre la Prevención del Genocidio", dijo. "Hemos fortalecido nuestra capacidad de mediación y la diplomacia preventiva. También iniciamos nuevos esfuerzos para proteger a los civiles sobre el terreno, incluida la política reciente "abierta" en el sur de Sudán."
Ban Ki-Moon también destacó las actividades de la Corte Penal Internacional, los tribunales internacionales y los tribunales nacionales. "El Tribunal Penal Internacional para Ruanda, con la cooperación de Ruanda y otros estados, sigue procesando a personas por su presunta responsabilidad en el genocidio", dijo.
Ban Ki-Moon instó al pueblo y al Gobierno de Ruanda a que siga promoviendo la apertura necesaria para la curación y la reconciliación y profundizar el respeto por los derechos humanos.
Sin embargo, el Secretario General consideró que aún quedaba mucho por hacer para integrar plenamente y aplicar las lecciones aprendidas del fracaso de la comunidad internacional en Ruanda.
Citó la incapadidad del colectivo para prevenir atrocidades en Siria durante los últimos tres años.